SOBRE LAS VIOLACIONES no nos quedaremos calladas!
El 12 de febrero del 2012 en L’Aquila, Rosa fue violada y dejada agonizante en la nieve por el militar de la operación “calles
seguras”, Francesco Tuccia. En el juicio lo defendieron los abogados Antonio Valentini y Alberico Villani. A apoyar a Rosa, dentro y fuera de las aulas de los Tribunales, fueron cientos de mujeres, tanto de L’Aquila que de otras ciudades, muchas de Roma. Salimos del aula en multitud cuando el abogado Valentini pronunció la frase “consentimiento mutuo” llevando a cabo una defensa que una vez más se centró en el fortalecimiento de la cultura de la violación.
En noviembre del 2015, el abogado Antonio Valentini fue invitado como representante de una asociación de la región de L’Aquila (Abruzzo) en una conferencia que se llevó a cabo en la Casa Internacional de las Mujeres de Roma. Luego de muchos intercambios de correos electrónicos y llamadas telefónicas con mujeres que rechazaban ese personaje, a través de una carta pública, se consigue revocar la participación de tal abogado en el evento.
El 13 de noviembre, la conferencia sobre la Comisión Grandes Riesgos “Hacia el Tribunal Supremo” se lleva a cabo en ausencia del defensor de Tuccia, sin embargo el 18 de mayo de 2016 el Fiscal de L’Aquila emite un orden de embargo de bienes tecnológicos a una compañera de Roma, que había difundido, por medio de una chat un correo electrónico que os mostramos a continuación.
La mujer ha sido denunciada por el abogado Antonio Valentini por difamación agravada.
Firmamos y difundamos la carta “incriminada”!
“Me dirijo a la Casa Internacional de las Mujeres. Soy de L’Aquila y en el terremoto perdí personas, lugares y recuerdos muy queridos.
Lo que pasó en L’Aquila en el 2009 y su continuación no lo olvidaré.
No olvido la violencia y la militarización con la que el Estado intenta ocultar sus responsabilidades, controlar las víctimas del terremoto y reprimir los que se atreven a luchar.
No olvido el saqueo por manos de los comité político-empresarial-mafiosos contra la vida de las personas desplazadas.
Cuando oí que el abogado Valentini iba a representar gratuitamente a todas las personas afectadas por el terremoto de L’Aquila, pensé que era un hombre valiente, pero luego me dí cuenta que no era valor, sino sólo un ejercicio de poder.
No, no olvido lo que sucedió en L’Aquila en el 2009 y su continuación.
Alrededor de 70.000 soldados llegaron provenientes de toda Italia para controlar 35.000 personas desplazadas en campamentos. Eran ellos los dueños del territorio, no las víctimas del terremoto de L’Aquila.
No, no olvido lo que sucedió en L’Aquila en 2009 y su continuación.
Cuando en la noche del 12 de febrero de 2012, en una discoteca de Pizzoli (AQ), una joven de 20 años, “Rosa”, fue violada y dejada casi muerta por un militar, Tuccia, en compañía de otros dos compañeros del 33° Regimiento de Artillería “Acqui”, utilizado en la operación “calles seguras “.
Son ellos los dueños del territorio y muchos, incluso, son de L’Aquila. Entonces el abogado Valentini, que es “amigo” de todos, tenía que corregir el tiro y conquistar a los más poderosos, los del brazo armado del Estado.
Es así que se ofrece en defender gratuitamente el violador Francesco Tuccia. Ya en las primeras audiencias por violación, las compañeras, las mujeres que vinieron de todas partes de Italia para apoyar a Rosa percibieron en modo tajante que en L’Aquila el militar violador estaba en un ambiente amigable.
Recuerdo claramente la sensación pegajosa de repugnancia y violencia, ejercida sobre la piel de nosotras mujeres, en las palabras del abogado Valentini: “Entre los dos jovenes había consentimiento expreso. La práctica de Fisting
presume una posición particular de las mujeres, absolutamente incompatible con las modestas equimosis encontradas en la joven y sobre todo con el hecho de que ella tenía, aunque caídos, los pantalones puestos “.
Modestas equimosis las laceraciones en el sistema digestivo y genital de Rosa! “Sólo” 48 puntos para reconstruir los órganos internos desgarrados! Salimos del aula disgustadas e indignadas por la violencia de la intervención que el abogado “amigo de todos” pronunciaba. Es por ello que el ingreso de una persona de este tipo en un lugar donde se lucha contra la violencia es un insulto, una amenaza para todas las mujeres y una provocación: Porqué justo en la casa internacional de las mujeres?
Pongo en juego los ovarios si la idea no haya sido de él, el abogado “Amigo de todos.”
Nos concierne a todas! Si tocan a una, nos tocan a todas!
se recojen firmas (colectivas e individuales) al mail:
militariallaquila(at)anche.no
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